Corea del Sur tendrá la mayor planta solar flotante giratoria del mundo

Corea del Sur va a ser conocido muy pronto como el país que cuenta con la mayor planta solar flotantegiratoria que existe. Con ella impulsará la generación de energía renovable en el país, en respuesta a la promesa electoral de su nuevo presidente, Moon Jae-In, candidato del Partido Democrático.

El liberal llega al poder cargado de promesas. Su imagen de activista amable y comprometido con los derechos civiles ha creado grandes expectativas frente a los diez años de gobiernos conservadores, salpicados por la corrupción. 

Entre otras promesas, Moon ha prometido subir salarios y crear casi un millón de empleos públicos, además de comprometerse a potenciar las pymes frente a los grandes conglomerados y, entrando en el tema que nos ocupa, fomentar la energía renovable. 

Entre otros aspectos, el nuevo presidente prometió abordar la grave contaminación atmosférica de las ciudades, así como un apagón nuclear como respuesta la ansiedad ciudadana que existe al respecto desde el accidente nipón de Fukushima acontecido en 2011. 

Y no es para menos, porque Corea del Sur tiene la friolera de 23 plantas nucleares, muchas de ellas muy viejas, con más de 20 años de edad. Tengamos en cuenta que la seguridad está muy relacionada con la antigüedad. 

Ahora, el nuevo presidente quiere conducir al país hacia una “era libre de energías nucleares”. Un guiño, por otra parte, al problema de la corrupción, puesto que la desconfianza en la energía nuclear aumentó por los escándalos de corrupción que involucraban a empresas de energía nuclear.

Plantas flotantes en todo el país

A poco más de dos meses de su elección, poco puede saberse sobre lo que cumplirá y en qué medida, si bien en esta última materia ya se ha puesto en marcha. Por lo pronto, el desarrollador de energía solar Solkiss planea construir una serie de plantas flotantes en todo el país con dicho objetivo.


Entre ellas, Solkiss está construyendo la mayor planta fotovoltaica del mundo flotante de paneles giratorios, una granja solar con 2,67 MW de capacidad, según informó la agencia nacional de noticias Yonhap. 

La mayor planta fotovoltaica flotante giratoria

En efecto, la compañía va a poner en marcha la mayor planta fotovoltaica flotante giratoria del mundo, un proyecto que se ubicará en el embalse de Deoku, en la ciudad e Hwaseong, al sur del país. Dicho breve y sencillamente, las placas no solo flotan en el agua, sino que además se caracterizan por seguir el movimiento del sol a lo largo del día para aumentar su productividad.

En porcentajes, la eficiencia energética de una instalación de energía solar de rotación está en torno a un 22 por ciento más que las convencionales en tierra y sobre un 16 por ciento mayor que las flotantes, según datos facilitados por Solkiss. 

Una interesante apuesta para aumentar la productividad, dentro de la nueva política energética, si bien ni siquiera con esta granja de récord sumada a otras que planea construir pueden garantizar el cumplimiento de su promesa. Entre otras cosas, porque es realmente ambiciosa. 

Y es que la capacidad necesaria es muy superior, teniendo en cuenta que el mandatario pretende cerrar las centrales nucleares y algunas plantas de carbón. Tengamos en cuenta que se trata de un país muy dependiente de este combustible fósil y de la nuclear, ya que el 70 por ciento de la capacidad instalada (110.000 MW) lo proporciona el carbón y las centrales nucleares. 

Si el objetivo es utópico a corto plazo, quizá en un futuro se vaya logrando. Sin embargo, sí parece estar más cerca de elevar significativamente las energías renovables por encima de su actual participación, en torno al 2 por ciento de la generación global, una cifra realmente baja. 

Para hacernos una idea de lo que supone este exiguo porcentaje, a nivel comparativo es la más baja de los 35 países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). 

La nueva política energética plantea el objetivo de aumentar los recursos renovables al 20 por ciento de la capacidad total de generación para 2035, para cuya consecución se apostará también por la ampliación de las centrales eléctricas móviles en todo el país. 

¿Adiós al carbón y a la nuclear?

El prometedor plan energético, con la mayor planta solar giratoria del mundo como punta de lanza del mismo, se recibe con gran alegría por parte de la población. No solo porque las urbes tienen una carga de contaminación importante, sino también porque en muchas de las áreas más pobladas existen reactores que hacen temer lo peor en caso de accidente provocado por una catástrofe natural, como un tsunami o maremoto. 

El fantasma de Fukushima ha hecho reaccionar al país, como ya lo hizo Alemania y, de forma menos contundente, también lo está haciendo el mismo Japón. No olvidemos que Corea del Sur tiene un alto riesgo sísmico y “un accidente nuclear causado por un terremoto podría tener un impacto devastador”, afirma Moon Jae-In.

A su vez, el mandatario quiere llevar a Corea del Sur a una era “posterior al carbón”, y espera poder avanzar de forma importante durante su mandato. En concreto, pretende cerrar 10 centrales térmicas de carbón antes de 2022.

Se apoyará para lograr ese cambio de modelo energético tanto en el gas natural como en las energías renovables limpias, con lo que también reducirá los gases de efecto invernadero de forma importante. Así pues, junto a la seguridad energética se avanzará en el cumplimiento del Acuerdo de París, al que el país se adhirió. 

Todo avance en este sentido, por otra parte, constituirá todo un logro a nivel global, puesto que se trata del noveno país más contaminador del planeta. Por lo pronto, además de esperar la inauguración de esta macro planta de récord, para 2030 el país se plantea poder cubrir el 20 por ciento de las necesidades energéticas de Corea del Sur con fuentes renovables, frente al 5 por ciento actual. 

Ello supondrá reducir a la mitad el uso del carbón, que caerá del 40 por ciento de hoy a un a 21,8 por ciento en los próximos quince años. Como también está ocurriendo en Alemania, un país que tiene mucho que enseñar al respecto, el apagón nuclear tendrá que esperar mucho más.