Gestión de residuos sanitarios peligrosos

La gestión de residuos sanitarios peligrosos debe ser llevada a la práctica de forma eficaz, pues si no se tratan adecuadamente pueden suponer un riesgo.

• 1 ¿Qué son los residuos sanitarios?
• 2 ¿Suponen algún riesgo este tipo de residuos?
• 3 Tipos de residuos sanitarios
• 4 Cómo es la eliminación y gestión de estos residuos

¿Qué son los residuos sanitarios?

Los residuos sanitarios son aquellos desechos de la actividad médica, sea en trabajos hospitalarios, farmacéuticos o laboratorios, tanto en tratamientos como en experimentación, que son residuos químicos de la medicación, restos infecciosos de estudios de cepas o inclusos orgánicos post quirúrgicos o postraumáticos, etc.

¿Suponen algún riesgo este tipo de residuos?

Si la gestión de los residuos sanitarios se lleva a cabo correctamente siguiendo todos los protocolos necesarios, no suponen un riesgo. No obstante, hay diferentes tipos de residuos sanitarios y, en función de ello, diferentes grados de peligrosidad en sí mismos, que oscilan desde nula, como envoltorios de medicamentos, a muy alta, como cuando se trata de desechos de investigar la curación de enfermedades muy infecciosas.

Tipos de residuos sanitarios

Los diferentes tipos de residuos sanitarios según su riesgo son los siguientes:

• Residuos sanitarios sin riesgo o inespecíficos de tipo I: Equivalen en peligrosidad a los desechos urbanos normales y no es necesario un tratamiento especial. Básicamente son papel y cartón de los envoltorios de medicamentos, de gasas o instrumental nuevo, material de oficina, cocinas, jardinería, reparaciones, bares y comedores. O sea, basura de actividades hospitalarias no sanitarias.
• Residuos sanitarios sin riesgo no específicos o de tipo II: Tampoco suponen un riesgo de contaminación biológica y las medidas de prevención sólo son necesarias en su manipulación, recogida, almacenamiento y transporte y sólo en el entorno sanitario. Se componen de residuos como elementos de curas, yesos, ropa y material de un sólo uso manchados con sangre, secreciones y/o excreciones (de pacientes sin problemas infecciosos).
• Residuos sanitarios de riesgo o específicos o de tipo III: Estos son los desechos que suponen un especial cuidado tanto en su manipulación, recogida, almacenamiento, transporte y tratamiento, como en su eliminación, sea dentro como fuera del centro generador, ya que estos son los considerados peligrosos tanto para la salud laboral como pública. Engloban aquellos residuos infecciosos que pueden transmitir algunas enfermedades; Bisturís, agujas, pipetas, portaobjetos, cubreobjetos, capilares, tubos de vidrio, vacunas vivas y atenuadas, cultivos y reservas de agentes infecciosos, inoculados biológicamente, resto de residuos sanitarios infecciosos y restos de animales utilizados en investigación y/o experimentación.

Cómo es la eliminación y gestión de estos residuos

La gestión de los residuos sanitarios peligrosos debe seguir un protocolo adecuado, estudiado para eliminar el riego, desde la recogida y trasladado hasta su eliminación.

El protocolo de la gestión de residuos sanitarios suele consistir en la utilización de envases homologados, con almacenamiento refrigerado para transportarlos. Luego pasan un tratamiento de esterilización por vapor caliente a presión por técnica de autoclave y finalmente se trituran.

El sistema de esterilización de los residuos sanitarios peligrosos mencionado, consiste en un sistema fraccionado de vapor al vacío.

Conlleva un mecanismo de vacío del aire del contenedor, que luego es sometido a vapor a una presión igual o mayor a 2 bar y a una temperatura igual o mayor a 135º C durante unos 15 ó 20 minutos.

Finalmente pasan por un sistema de alta eficiencia en la limpieza de gases. Una vez pasado este proceso, se catalogan como residuos sanitarios inocuos de tipo II, convirtiéndose en desechos inofensivos.